EL
CRISTIANO QUE VISITO EL TERCER CIELO, NO SE DA GLORIA ASI MISMO.
El apóstol Pablo nos enseña que no nos conviene
gloriarnos por visiones o revelaciones que podamos tener nosotros los
cristianos. Veamos: 2 Corintios 12:1. Ciertamente no me conviene gloriarme; pero vendré a las visiones y a las
revelaciones del Señor. (Versión RV60).
El
apóstol Pablo en su humildad, no quiere gloriarse de haber sido arrebatado al
tercer cielo y en lugar de decir que él fue, dice que conoció al hombre en
Cristo que fue arrebatado hasta el tercer cielo. Veamos: 2 Corintios
12:2. Conozco a un hombre en
Cristo, que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé;
si fuera del cuerpo, no lo
sé; Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo. (Versión RV60).
El
apóstol Pablo no esta seguro si él fue al tercer cielo en alma y espíritu, o
fue en vida completa, con cuerpo, alma, y espíritu, pero reconoce que fue al
tercer cielo. Existe la posibilidad de que el apóstol Pablo haya ido al tercer
cielo solo en alma y espíritu, porque él fue apedreado y arrastrado fuera de Listra
y dado por muerto. (Véase. Hechos 14:19). Veamos: 2 Corintios 12:3. Y conozco al tal hombre (si en el cuerpo, o fuera del cuerpo, no lo sé;
Dios lo sabe), (Versión RV60).
El
apóstol Pablo confirma que el Paraíso de Dios esta en el Tercer cielo. Además, informa que oyó palabras maravillosas que no
les dado a los hombres puedan expresar. Veamos: 2 Corintios
12:4. Que fue arrebatado al
paraíso, donde oyó palabras inefables
que no le es dado al hombre expresar. (Versión
RV60).
El
apóstol Pablo menciona que del hombre que fue arrebatado hasta el tercer cielo
podría gloriase, sin embargo no lo hace, y mas bien se gloria de sus
debilidades. Veamos: 2 Corintios 12:5.
De tal hombre me gloriaré; pero de mí
mismo en nada me gloriaré, sino en mis
debilidades. (Versión RV60).
Gloriarse uno mismo no es
cristiano, porque el apóstol Pablo, a pesar que fue gloriado por habérsele
permitido ser arrebatado al tercer cielo, aun así él sigue siendo humilde, ni
quiere que la gente piense que es más que los demás. Veamos: 2 Corintios 12:6. Sin embargo,
si quisiera gloriarme, no sería
insensato, porque diría la verdad; pero lo dejo,
para que nadie piense de mí más de lo que en mí ve, u oye de mí. (Versión RV60).
Dios permitió que en el cuerpo de
Pablo existiera un Aguijón, para que el no se exultase así mismo. Y aunque Pablo le pidió al Señor que le quitara dicha enfermedad, Dios no lo hizo para
que no se enalteciera delante de los demás. Veamos: 2 Corintios
12:7 y 8-. Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado al
Señor, que lo quite de mí. (Versión RV60).
DIOS BENDIGA AL
LECTOR DE ESTE MENSAJE. AMEN.